El crecimiento económico estadounidense en la segunda mitad
del siglo XIX fue espectacular si lo comparamos con otros países. En este
periodo, concretamente desde la última década de ese siglo, Estados Unidos
superó a Reino Unido como primera potencia económica mundial. Esto sigue
ocurriendo en la economía de los Estados Unidos de América en la actualidad.
Dicha economía es la más grande del mundo, con un PIB nominal.. estimado en más
de 17,2 billones de dólares en el 2014. El PIB nominal de los Estados Unidos es
una cuarta parte del PIB nominal mundial aproximadamente. Además, Estados
Unidos también tiene un alto nivel de producción y uno de los PIB per cápita más
altos en el mundo, lo que hace que sea un gran país comercial.
A la hora de explicar
el crecimiento económico de dicho país en el pasado, la mayoría pensamos en la
conocida teoría del crecimiento. En la que los principales factores influyentes
eran la cantidad de riquezas en recursos
naturales, de tierras, la rapidez de Estados Unidos en utilizar maquinaria para
la agricultura, el desarrollo del transporte con la creación de canales y la aparicióndel ferrocarril. Todo esto, junto al esfuerzo de invertir de Estados Unidos en
capital humano y de forma interna derivó en la formación de un mercado interno
con bajos coste e incrementos en la productividad. Pero, ¿Y en la actualidad, hay
algo nuevo en la teoría del crecimiento? ¿Cuáles son los principales motores que mantienen el
crecimiento de este país?
Para contestar dichas preguntas he decidido plantear la teoría
de Alan Greenspan. En su teoría plantea que
en la actualidad, dicho crecimiento es fruto del avance tecnológico, que
aumentan el rendimiento de sectores que utilizan tecnologías recientes.
Greenspan determina que la consecuencia de este avance es la productividad del
trabajo y que la etapa expansiva del capitalismo estadounidense vino dada por la
tecnología e innovaciones. Estos dos últimos factores fueron los responsables
del crecimiento y el incremento en la productividad, según Greenspan
Como toda teoría, esta también tuvo otras opuestas o que no estaban
de acuerdo con lo que expresaba. Los economistas clásicos estaban de acuerdo en
que la tecnología y las innovaciones aportaban una mejora en la productividad,
una mayor eficiencia en la mano de obra, pero pensaban que estos factores eran
secundarios, específicos, para la creación de riqueza en el país. En la primera
mitad del siglo XX, se concluyó que los únicos factores productivos determinantes
del crecimiento, serian: tierra, capital y trabajo. Aún en la actualidad la
productividad de un país se calcula con una función, la cual incluye dichas
variables. Y= Af(T,K,L) La razón por la cual se utilizan estas variables para
determinar la productividad y PIB de un país es simple, ya que cuanto más se
usen o se tengan de estas variables, mayor será el crecimiento económico de países
capitalistas como Estados Unidos.
Desde mi
punto de vista, pienso que establecer unos factores fijos no es necesario, ni
exacto porque verdaderamente no se sabe con exactitud la influencia que tiene
cada factor en la producción ni si unos son más importantes que otros, para
colocarlos en segundo lugar, como ocurre en con la tecnología e innovación.
-Nuria Monje Puerta
Gran parte de la población en época de crisis, alguna vez se ha preguntado que si lo que falta es dinero por que no crean más, la respuesta a esto es el efecto de la hiperinflación que hace referencia al desorden monetario provocado por la subida rápida e incontrolada de los precios. La moneda del país que la padece pierde su valor. Para adquirir mercancías y servicios es necesario el desembolso de grandes cantidades de numerario. Por su parte, los salarios crecen a menor ritmo que los precios y con ello se erosiona su poder adquisitivo. La masa monetaria circulante es enorme, pero su valor nominal no se corresponde con el real. El mayor caso de hiperinflación se dio en Alemania en los años 20. El ejemplo de la hiperinflación alemana de 1923 es alucinante aun para los propios alemanes que lo vivieron. En esa época, el gobierno socialista de Alemania creyó que podía imprimir ilimitadamente billetes de banco con los cuales cubrir el déficit de las industrias estatizadas (ferrocarriles, teléfonos, etc.) y saldar alegremente las deudas del Estado. El resultado fue la descontrolada hiperinflación de 1923 que produjo desocupación, saqueos callejeros, caos social y toda clase de calamidades que finalmente condujeron a un horror aun peor: el nazismo.. La principal causa imputable a tal hecho fue la necesidad que tenía la República de Weimar de hacer frente a las indemnización fijadas por los vencedores de la Gran Guerra en el tratado de Versalles La República de Weimar, el régimen democrático que sucedió al II Reich en 1918, tuvo que afrontar desde el final de la Gran Guerra una situación económica pésima con el colapso financiero. El abandono del patrón oro en 1914 por parte del Reichsbank había permitido a Alemania, financiar el esfuerzo bélico a base de crédito y no en vez de a través del incremento de impuestos, dos terceras partes del cual se nominalizó en forma de bonos de guerra comprados por ciudadanos y empresas, siendo la otra financiada directamente por el Reichsbank.Así, al firmarse el armisticio, la deuda del Estado se había multiplicado por 30. En 1919, el pago de la deuda y los intereses supuso el 126 por ciento del producto interior bruto alemán. Alemania estaba técnicamente en bancarrota, y la opción por la que se decantó el Reichsbank fue seguir imprimiendo papel moneda sin respaldo oro, con el llamado Papiermark, que había sustituido al Goldmark en 1914, para poder pagar las deudas, con la consiguiente depreciación del dinero circulante.Las consecuencias de la hiperinflación es que elimina el poder adquisitivo de ahorros públicos y privados, distorsiona la economía en favor de un consumo extremo y la acumulación de bienes reales, causa la fuga del país de la base monetaria, etc.Aunque la inflación remitió a partir de 1924, la ruina de los pequeños ahorradores, el empobrecimiento de los asalariados y el desempleo, provocaron serios problemas sociales y el descrédito de la República de Weimar.La hiperinflación alemana no es la única que conocemos ya que la hiperinflación en Zimbabwe es una de las peores de la historia.Justo antes del proceso de hiperinflación el Banco Central emitió billetes de forma masiva para pagar la deuda externa del gobierno del país Zimbabwe , una vez considerado como uno de los países más prósperos de África , sufre una grave crisis económica desde que Mugabe decidió en el año 2000 expropiar las tierras a los granjeros blancos y cedérselas a la población negra que no poseía tierras y que por lo tanto en muchas ocasiones tampoco sabía cómo cultivarla o cómo comercializar los productos .Las consecuencias de esta hiperinflación fueron enormes, las mas importantes están relacionadas con el mercado;Los precios aumentaban varias veces al día, por este motivo algunas personas decidieron comenzar con el trueque y no empobrecer.. En Enero de 2009 el Gobierno permitió el uso de divisas extranjeras, en especial el dólar estadounidense y el rand sudafricano, de hecho se utilizaban ya por la población y actualmente la moneda oficial es el US$ o el rand sudafricano. La moneda local ha caído totalmente en desuso.El abandono de su moneda ha permitido a Zimbabwe volver a unos niveles aceptables de inflación. Los alimentos han bajado pero los servicios han subido de una manera exorbitante. Tenemos esperanza en que estos casos de hiperinflación no se vuelvan a repetir.
-Nuria Monje Puerta